Trabajo para el 24 de junio, Hay que refundar la ONU, Federico Mayor Zaragoza.

GILMA J. GAMEZ LOPEZ - lunes, 21 de junio de 2010, 21:19

"Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión". ARTÍCULO 19 - Declaración Universal de los Derechos Humanos.

El papel de la información pública en relación con tres bloques temáticos:

1. El Estado como proveedor de información pública para transparentar sus actos, desarrollar la democracia y potenciar el desarrollo de los Derechos Humanos.

2. El nuevo rol de las unidades de información ante los Derechos Humanos.

3. La Ciudadanía ante una cultura de la información por los Derechos Humanos.

Ejes Temáticos para Ciberespacio y Ciudadania

1.- INFORMACIÓN Y DERECHOS HUMANOS

Derecho a la información pública

Derecho a la información veraz

Derecho (comparado) a la protección de datos personales

2.- INFORMACIÓN Y EDUCACIÓN

Educación en derechos humanos

Educación, paz y desarrollo

Educación y democracia

Educación y medio ambiente

Educación científica, técnica, cultural y permanente

3.- INFORMACIÓN CONTRA LA MANIPULACIÓN

Delictiva

Política y social

Económico-empresarial

Cibernética

Las TIC al servicio del Derecho Humano a la Información, de la Educación para los Derechos Humanos y Contra la Manipulación.


Las TIC al servicio del Derecho Humano a la Información, de la Educación para los Derechos Humanos y Contra la Manipulación.

martes, 6 de julio de 2010

Objetivos y programa

Objetivos y programa: "Objetivos y programa

Objetivo de la undécima Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe

La undécima Conferencia Regional se abocará a examinar los logros y desafíos regionales en materia de igualdad de género, prestándose especial atención a la autonomía y el empoderamiento económico de las mujeres, sobre la base de la evaluación de los principales avances y retos en el cumplimiento de los compromisos acordados en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer (Beijing, 1995) y las conferencias regionales sobre la mujer. Se proponen las siguientes preguntas estratégicas para orientar el debate:

1. ¿Qué tipo de desarrollo económico y de democracia son necesarios para alcanzar la igualdad entre hombres y mujeres?

2. ¿Que políticas públicas favorecen la igualdad de género en el contexto de los modelos de crecimiento y desarrollo de los países de la región?

¿Qué Estado para qué igualdad? es el tema de la undécima Conferencia Regional. La CEPAL presentará un documento de posición en que se examinan los logros y desafíos que enfrentan los gobiernos de la región en materia de igualdad de género, a la luz de las interacciones entre el Estado, el mercado y las familias, como instituciones sociales construidas mediante políticas, instituciones, leyes, usos y costumbres, que en conjunto establecen las condiciones para renovar o perpetuar las jerarquías sociales y de género. ¿Qué Estado para qué igualdad? es la pregunta que se plantea y se intenta responder desde la perspectiva de los derechos humanos de las mujeres, que constituyen el parámetro que la comunidad de naciones ha fijado para impulsar y medir los avances en materia de igualdad de género.

Información preliminar:

*
Panel de alto nivel: ¿Qué Estado para qué igualdad?
*
Panel 1: Empleo, responsabilidades familiares y obstáculos socioculturales a la igualdad de género en la economía
*
Panel 2: Políticas de desarrollo y tiempo de las mujeres
*
Panel 3: El empoderamiento económico de las mujeres: acceso a las tecnologías y a los activos productivos y financieros
*
Panel 4: ¿Después de la crisis, qué?
*
Panel 5: El empoderamiento económico de las mujeres: los grupos más vulnerables
*
Sesión especial Haití-Chile: (Re) construir la igualdad

Enlaces relacionados

Otros enlaces
Programa Preliminar (pdf 28 KB)

- Enviado mediante la barra Google"

jueves, 24 de junio de 2010

Docu_Estudios_Feministas_Humanidades.pdf (application/pdf Objeto)

Línea de investigación propuesta DESDE LA PERSPECTIVA DE GENERO
Estudios_Feministas_Humanidades

OBJETIVOS

DE UNA asignatura se propone analizar la diferencia
de los sexos tal como ésta se construye
en la historia contemporánea, en relación
con las transformaciones sociales, económicas,
culturales y políticas de la época.
Desde las perspectivas abiertas por las nuevas
tendencias historiográficas, en particular la
historia de las mujeres y la historia sociocultural,
se abordará el debate intelectual al respecto
de la “naturaleza” y las funciones sociales
de mujeres y hombres y la producción
de significados simbólicos y de comportamientos,
así como la constitución de las mujeres
como sujetos, a través de sus prácticas
sociales y de relación y sus estrategias de vida
y pensamiento.

CONTENIDOS

Introducción teórica y metodológica para
el estudio de la historia de las mujeres y de
la historia del género. Historia crítica, sexismo
y androcentrismo. Mujeres, Género y
construcción de la diferencia en los procesos
de cambio social. Perspectivas históricas de
las relaciones de género y su análisis desde la
teoría feminista. Historia de las relaciones de
género y de los feminismos en España.
PROGRAMA
1.– TEORÍA Y METODOLOGÍA PARA
EL ESTUDIO DE LA HISTORIA
DEL GÉNERO Y LA HISTORIA DE
LAS MUJERES
– Mujeres, género y construcción de la
diferencia en los procesos de cambio social.
– Historia crítica, sexismo y androcentrismo.
– Introducción al concepto de género
como categoría analítica. – La variable
sexo/género, el patriarcado y la división sexual
del trabajo. – La teoría feminista como
teoría crítica en la historiografía actual.
10
ARTE Y HUMANIDADES
2.– LA CONSTRUCCIÓN HISTÓRICA
DE LAS RELACIONES DE GÉNERO
EN LA SOCIEDAD Y EN LA
CULTURA BURGUESA
Género y revolución burguesa.- De los
discursos ilustrados a la “economía moral”
capitalista. – Imaginario burgués y prácticas
sociales: cultura romántica, ciencia y
sujeto femenino. – Matrimonio y familia
como relaciones de género: el ángel de la
casa como ideal burgués. – La génesis del
“ama de casa”: trabajo que no es trabajo y
economía que no es dinero.
3.– LIBERALISMOS,
REVOLUCIÓN FRANCESA
Y FEMINISMOS
Misoginia y revolución liberal: esfera
pública burguesa y exclusión femenina. –
Ciudadanía femenina y derechos: la lucha
por la participación en la esfera pública y
por la igualdad política y jurídica. – El feminismo
como radicalización del discurso
ilustrado.
4.– LAS MUJERES Y LOS
MOVIMIENTOS SOCIALES
CONTEMPORÁNEOS
Feminismo y liberalismos. – Los sufragismos
y la lucha por la igualdad política:
los ejemplos de Estados Unidos y Gran Bretaña.
– Feminismo, socialismos y movimiento
obrero: librepensadoras, socialistas,
fourieristas, saintsimonianas, y anarquistas.
5.– MUJERES Y TRABAJO
EN LA ECONOMIA
CAPITALISTA
Género y trabajo: reconceptualización
del trabajo en el capitalismo.- Protoindustria,
industrialización y trabajo femenino.
– El trabajo doméstico como categoría
económica. – Las trabajadoras y el
movimiento obrero: la lucha por la igualdad
laboral.
6.– LA REMODELACIÓN DE LAS
POLÍTICAS DE GÉNERO EN EL
SIGLO XX
La igualdad política y los límites del
orden burgués. – Políticas pronatalistas y
antinatalistas. – Las mujeres en los períodos
bélicos contemporáneos. – Políticas
sexuales bajo el fascismo. – Mujeres y sociedad
del bienestar: más allá de la igualdad.
– Los feminismos en el siglo XX y la
sociedad actual: igualdad, diferencia, paridad.
7.– LAS MUJERES EN LA HISTORIA
CONTEMPORÁNEA
DE ESPAÑA (I)
El orden liberal burgués: marco jurídico,
educación y trabajo femeníno en la sociedad
española del siglo XIX. – Los inicios de
la ciudadanía femenina: liberalismos radicales,
librepensamiento, utopismo y feminismos.
– Sociedad y género en la II República:
sufragio, ciudadanía y políticas de
género. – Mujeres y guerra civil: las transformaciones
en la vida cotidiana y en la esfera
pública. – Feminismos y política durante
la guerra: Mujeres Antifascistas, Mujeres
Libres.
8.- LAS MUJERES EN LA HISTORIA
CONTEMPORÁNEA
DE ESPAÑA (II)
Las mujeres bajo la dictadura franquista:
legislación y subordinación de género.
– Los planteamientos ideológicos: patriarcado,
nacionalcatolicismo y natalismo.- La
Sección Femenina. – La vida cotidiana: de
puertas adentro, la “mujer mujer” y los
usos amorosos. – Los cambios en los años
sesenta. – La emergencia del feminismo en
la transición política y la

Javier Echeverría / Filósofo - Elkarrizketa - Euskonews

Javier Echeverría / Filósofía y Ciencia


Javier Echeverría (Pamplona, 1948)

Javier Echeverría Ezponda nació en Pamplona en 1948. Es investigador de la Fundación Vasca de Ciencia Ikerbasque, adscrito a la Universidad del País Vasco (Departamento de Sociología II) y Catedrático de Universidad en excedencia del Instituto de Filosofía del CSIC. Sus principales campos de investigación son la filosofía de la ciencia y la tecnología; la ética de la Ciencia; el estudio de las relaciones entre ciencia, tecnología y sociedad y las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.

Principales libros publicados en los últimos años: Telépolis (Barcelona, Destino, 1994); Cosmopolitas Domésticos (Barcelona, Anagrama, 1995); Los Señores del Aire: Telépolis y el Tercer Entorno (Barcelona, Destino, 1999); Introducción a la Metodología de la Ciencia: la Filosofía de la Ciencia en el siglo XX (Madrid, Cátedra, 1999); Ciencia y Valores (Barcelona, Destino, 2002); La revolución tecnocientífica (Madrid, Fondo de Cultura Económica, 2003), Gobernar los riesgos: Ciencia y valores en la sociedad del riesgo (edición en colaboración con J. L. Luján, Madrid, OEI-Biblioteca Nueva, 2004) y Ciencia del bien y el mal (Barcelona, Herder, 2007). Es miembro de la International Academy of the Philosophy of Science y Vicepresidente de la Sociedad Española Leibniz. Obtuvo el Premio Anagrama de Ensayo 1995, el Premio Euskadi de Investigación 1997 en Humanidades y Ciencias Sociales y el Premio Nacional de Ensayo 2000 (otorgado por el Ministerio de Cultura por su obra Los Señores del Aire).

Me encantó esta entrevista hecha por la revista Fusión

Javier  Echevarr�a

NOVIEMBRE 2005

JAVIER ECHEVARRIA
Fil�sofo, matem�tico e investigador CSIC

El mundo ya no es el que conocimos hace veinte a�os. La aparici�n de nuevos medios tecnol�gicos ha cambiado las guerras, la econom�a e incluso nuestra vida dom�stica y el ocio. Javier Echevarr�a nos conduce a una reflexi�n sobre el espacio electr�nico y sus consecuencias.
Texto: Marta Iglesias Foto: Emeterio Su�rez Guerra

El espacio electr�nico

-Afirma que "la vida p�blica adquiere un formato dom�stico: ya no hace falta salir a la calle para informarse de qu� sucede". �Qu� ganamos y qu� perdemos en ello?
-El cambio principal es que los seres humanos, gracias a las nuevas tecnolog�as, podemos hacer cosas a distancia independientemente de donde estemos y por lo tanto nuestras capacidades de acci�n han aumentado enormemente. Por otro lado, no hemos perdido nada, podemos seguir comunic�ndonos, viendo a la gente, hablando con todo el mundo... Otra cosa es luego c�mo cada cual se adapte y lleve esas tecnolog�as; si se convierte en un adicto o se a�sla s� que pierde cosas. Pero por el hecho de que aparezca un tel�fono uno no est� obligado a tenerlo, a tener un ordenador o un televisor. Con lo cual no ha desaparecido nada, simplemente se abren nuevas posibilidades.

-�C�mo influyen las nuevas tecnolog�as en la percepci�n de lo que somos y de lo que son los dem�s?
-Efectivamente hay varias posibilidades de expresarse. Uno sigue siendo la persona de carne y hueso que vive en su ciudad o su pueblo, pero adem�s de eso puede tener otras personalidades y personajes virtuales en Internet, construirlos, tener relaciones en el tercer entorno. Es decir, que ha aparecido un nuevo espacio social donde las personas tienen un mont�n de m�scaras electr�nicas que forman parte de su propia identidad. Y un gran ejemplo es la televisi�n. Las relaciones entre las personas a trav�s de la televisi�n cambian radicalmente. Nos da la impresi�n de que lo que sale en televisi�n es lo real, lo importante. Es decir, todo lo que es la teleimagen, la telepersona -sea a trav�s de Internet o de la televisi�n o v�deos-, se impone a la imagen de uno cada vez m�s, pero con esa posibilidad de tener varias personalidades o lo que llamo el sujeto plural. Se trata de una pluralidad de identidades frente a una �nica identidad.

"Hoy en d�a en la red econ�mica telem�tica financiera se mueve la mayor parte del dinero a lo largo de todo el planeta"

-Y ese sujeto plural del que habla, �implica la negaci�n de la realidad?
-La mayor parte de la vida no transcurre en estos espacios electr�nicos. Por ejemplo, la media de ver televisi�n son cuatro horas en Espa�a. Pero mientras la persona puede estar hablando, en familia... es decir, que este tercer entorno se superpone a los otros. Influye el tiempo que uno dedica a esta realidad virtual: si no duerme, est� todo el d�a viendo la tele, navegando por Internet o jugando a los videojuegos, esta persona acaba enferma en muy pocos d�as. Para m� el equilibrio de la persona est� en participar de todo. Yo aconsejo un tercio de tiempo para cada entorno: un tercio para la naturaleza, como ir al monte, nadar, pasear; otro tercio para la ciudad, como andar por las calles, alternar, hablar con los compa�eros; y el �ltimo tercio, no m�s de cinco horas y media al d�a, para los espacios virtuales. Ese es el modelo de vida equilibrada que yo propongo, para vivir en estos tres tipos de realidad.

-�Dir�a que es democr�tico el espacio electr�nico?
-La televisi�n, que forma parte del espacio electr�nico, no es democr�tica. No elegimos sus directivos, no votamos a los que dirigen las cadenas o al que presenta tal programa. La televisi�n, sea privada o p�blica, no es un sistema democr�tico en absoluto. Internet es m�s democr�tico en el sentido de que uno mismo puede poner contenidos en la web. Digamos que hay grados de democracia y en Internet tambi�n hay poderes que tienen que ver con el acceso, con el control, con las propias tecnolog�as. De hecho hay tecnolog�as que controlan a sus usuarios. O sea que todav�a habr�a que controlar a los "se�ores del aire", que es como yo llamo a las transnacionales que tienen poder en Internet, la televisi�n, la telefon�a...

-�Qu� funciones realizan esos "se�ores del aire" a los que se refiere?
-Los "se�ores del aire" son los que dominan, construyen, desarrollan, mantienen e innovan en el �mbito de las nuevas tecnolog�as. Por ejemplo quienes controlan las tarjetas de cr�dito -Visa, American Express, Mastercard-son los que dominan la mayor parte de la circulaci�n del dinero. Las grandes empresas transnacionales que controlan los flujos del dinero electr�nico y las tecnolog�as que permiten las transferencias interbancarias, controlan un �mbito importante de la actividad humana. Luego est�n los "se�ores del aire" que se ocupan del espacio militar y que son muy relevantes. Tienen un enorme poder como es el espionaje, el control, las escuchas... Y luego hay aquellos que vigilan la zona civil del espacio electr�nico, que son los que controlan c�mo navega uno por Internet -los m�s poderosos ser�an Microsoft y Google-, qu� canal de televisi�n utiliza, a cu�les se conecta, a qu� tel�fonos m�viles llama uno... Son las grandes empresas que proveen el acceso del servicio y que por lo tanto controlan tambi�n lo que hacen los usuarios. Controlan desde el dinero electr�nico a los informativos, las noticias o los videojuegos. Pueden hacer estudios sobre las costumbres, las preferencias de los usuarios... Entonces ah� se adquiere un poder. No es un control directo, sino indirecto de mercado, que puede convertirse en directo como bien se ha visto el 11-M o m�s recientemente en Londres. En general el poder que tienen los proveedores de las tecnolog�as sobre los usuarios es considerable y �sa es la raz�n de fondo por la cual el espacio electr�nico no es un espacio democr�tico sino un espacio neofeudal, en el sentido de que hay feudos de la informaci�n controlados por los grandes "se�ores del aire".

"Los �se�ores del aire� dejan a nuestros cuerpos libres, pero no a nuestras mentes. Eso es lo que les interesa controlar."

-En este espacio neofeudal dominado por los "se�ores del aire", �nosotros ser�amos los vasallos? �Qu� cuota estamos pag�ndoles?
-Pagamos una cuota mental, es decir, nuestros h�bitos mentales y de comportamiento y las cosas que nos importan y nos interesan son las que los "se�ores del aire" nos marcan con su impronta. Antes los se�ores feudales marcaban al siervo con su sello. En este momento los "se�ores del aire" lo que marcan no es el cuerpo sino la mente. Imprimen su impronta, de tal manera que si uno est� acostumbrado a una determinada cadena de televisi�n, a usar un sistema de navegaci�n, un sistema operativo en Internet, una determinada consola de videojuegos o una tarjeta electr�nica, entonces buena parte de lo que hace habitualmente en su vida est� marcado por el "se�or del aire". Este genera una nueva tecnolog�a y uno se tiene que adaptar a ello, cambiar de consola, de programaci�n... Digamos que la relaci�n es de vasallaje mental. Los "se�ores del aire" dejan a nuestros cuerpos libres pero no a nuestras mentes. Eso es lo que les interesa controlar, orientar. Es una nueva forma de poder, porque el tercer entorno sobre todo son mentes interconectadas.

-�Qu� ser�a necesario para que Internet dejase de ser tan neofeudal y se encaminase a una mayor democracia?
-Yo insisto en que lo m�s importante ser�a comenzar por la televisi�n, porque es la nueva tecnolog�a donde hay m�s usuarios, la de mayor incidencia social y la menos democr�tica. Que los usuarios pudi�ramos elegir en el �mbito de las redes telem�ticas y de dinero electr�nico, que tuvi�ramos derecho a que los datos de c�mo usamos nuestras tarjetas de cr�dito no sean usados, a elegir directamente a los responsables de estas redes. Es decir, para que exista democracia en el espacio electr�nico hay que avanzar much�simo. En cuanto a Internet, mi idea b�sica para democratizar el espacio electr�nico es construir Tel�polis aplicando la Declaraci�n de Derechos Humanos de 1948 al espacio electr�nico.

"Algo con tanta incidencia social como la televisi�n, los cajeros de dinero electr�nico o Internet, es sin embargo un enorme artificio completamente endeble y mantenido por los seres humanos"

-La aparici�n de las redes telem�ticas, �qu� nuevas realidades pol�ticas y mentalidades sociales ha acarreado?
-El cambio mayor que ha tra�do es la ciberguerra o teleguerra, la posibilidad de hacer la guerra a distancia, es decir, de controlar a distancia artefactos armados o no, como pueden ser bombarderos, sat�lites de comunicaci�n, sondas espaciales... La segunda gran red telem�tica es la financiera, por donde fluye el dinero electr�nico, conectan los bancos y las bolsas, por donde nos llega nuestra n�mina, se usan las tarjetas de cr�dito... Es decir, que ya hoy en d�a en la red econ�mica telem�tica financiera se mueve la mayor parte del dinero a lo largo de todo el planeta. El tercer sector de cambio es el civil, la sociedad que desde hace quince a�os se va incorporando a Internet.

-�No nos estamos basando demasiado en un sistema tecnol�gico totalmente endeble, donde un corte de electricidad es suficiente para detenerlo?
-No s�lo endeble sino inestable. El espacio electr�nico es completamente artificial, sostenido totalmente por los seres humanos con un sistema muy complejo tecnol�gico que efectivamente requiere una energ�a para su funcionamiento como es la electricidad. Con lo cual, si no hay esa energ�a o se caen abajo las redes el�ctricas entonces el espacio electr�nico se viene abajo con estr�pito. En ese sentido da idea de que algo con tanta incidencia social como la televisi�n, los cajeros de dinero electr�nico o Internet, es sin embargo un enorme artificio completamente inestable, endeble y por lo tanto mantenido por los seres humanos. Por eso es un espacio muy diferenciado. Uno construye una ciudad o una casa y eso dura m�s o menos unos a�os, pero el espacio electr�nico hay que sostenerlo, mantenerlo activo y reestructurarlo cada cinco a�os porque las tecnolog�as se quedan obsoletas y hay que renovarlas. La sociedad de la informaci�n est� continuamente en obras, en renovaci�n. Eso no tiene precedentes en la historia humana: construir todo un espacio social enormemente rico, complejo, donde la gente trabaja, hace negocios, desarrolla mil actividades y sin embargo con construcciones que hay que renovar y mantener. Es otra de las diferencias cualitativas del espacio electr�nico con respecto a la naturaleza y la ciudad.

por_una_cultura_libre.pdf (application/pdf Objeto)

LAWRENCE LESSIG

Por una cultura libre
Cómo los grandes grupos de comunicación
utilizan la tecnología y la ley para clausurar
la cultura y controlar la creatividad

PARA LOS OJOS EUROPEOS o HISPANOS LOS
planteamientos de Lawrence Lessig Exóticos por la claridad,
la sencillez y la moderación tan propias de un jurista estadounidense, que
quiere ante todo convencer y hacer comprender sin importar la adscripción
política del lector, como ajenas a las tradiciones jurídicas continentales
mucho más posicionadas, «profundas» y en última instancia inasequibles.
Tremendamente actual, porque aunque casi todas las referencias se
deben al contexto estadounidense, las legislaciones europeas y de América
Latina están convergiendo progresivamente con las del gigante de América
del Norte. Y aunque los principales rasgos de esta convergencia sean negativos,
la influencia del carácter jurisprudencial y más abierto al diálogo
social del derecho estadounidense puede representar un enriquecimiento
del debate público sobre la llamada «propiedad intelectual» y su gestión por
parte de nuestros gobernantes.
Por una cultura libre es, por lo tanto, una excavación en el futuro inmediato
de la batalla por las tierras comunales de la cultura y el pensamiento, una
batalla en la que los avances legales y las nuevas regulaciones se muestran
extremadamente adversas para los principios de la libre circulación del conocimiento
y la información, pero en la que algunas estrategias expuestas se
presentan como herramientas de una libertad tremendamente prometedora.
La edición del presente libro en papel es el fruto de la cooperación y colaboración,
muchas veces desinteresada, de un amplio número de personas.
Seguramente no hubiera sido posible abordar un proyecto de semejante
magnitud sin la traducción realizada por Antonio Córdoba en el marco del
proyecto elastico.net. La labor editorial de Javier Candeira ha sido de extremada
importancia a la hora de corregir la traducción y de asegurar su rigor
en algunos conceptos difíciles.

Vice Vhön Khamy: Milton Friedman y el neoliberalismo.

Milton Friedman y el neoliberalismo.Y los Chicago Boys

Escrito que me gusto mucho la narrativa del padre del noliberalismo Autor Vhön Khamy

Milton Friedman y el neoliberalismo.


Hoy vamos a recordar la figura de una persona que nos dejó recientemente: Milton Friedman.
No quiero engañar a nadie, yo no soy ese tipo de personas que piensan que debe hablar bien de alguien por el simple hecho de habernos abandonado. Lo único bueno que se puede decir de este señor es que ganó el premio Nobel de economía en 1976, pero creo que esto habla peor de este premio que bien del personaje, claro que eso, contado así, no es más que una mera opinión.

Hablar de Friedman es hablar de la “escuela de Chicago” ya que él fue su máximo exponente y sus teorías económicas guiaron a gobiernos como el de Richard Milhous Nixon, Margaret Thatcher, Ronald Reagan y Augusto Pinochet, que bajo sus auspicios borraron todo rastro de política económica keinesiana. En pocas palabras, Milton Friedman es el padre del neoliberalismo económico que promulga la diferenciación social entre los sometidos a las multinacionales y un mundo paria que no merece ningún respeto. Por supuesto que esto no se formula así en sus teorías. Friedman, y en general la escuela de Chicago, retorna a las ideas esenciales de Adam Smith, sin embargo, la teoría de la mano invisible se fue desmoronando conforme evolucionó la globalización. Tarde, muy tarde se descubrió la máxima de que “la riqueza ni se crea ni se destruye, sólo cambia de manos”. Cuando no teníamos un conocimiento global los mercados se autorregulaban y compensaban solos, pero ahora vemos que para producirse esa regulación debe crearse un nuevo flujo de recursos mercantiles desde otro lugar que descompensan en origen y a su vez se regula con recursos de otro lado, etcétera. Los flujos de compensación se globalizan, pero cuando en un punto se concentran varios flujos de compensación, se produce una crisis, esta crisis impide que los recursos de compensación fluyan de la forma necesaria y eso extiende la crisis de mercado en mercado buscando una mano invisible que los compense y si esa mano no llega aparece una crisis global. El mejor ejemplo de este tipo de crisis fue la de los “tigres asiáticos” y en el fondo de esta crisis el error de la escuela de Chicago.
La teoría neoliberal no es una teoría real, lo cierto es que no es más que una burda excusa para que las grandes empresas puedan seguir sus formulas fagocitarias de mercados. El neoliberalismo se resume en una frase: “lo que es bueno para la empresa es bueno para todo”. Creo que la palabra Irak ya lo dice todo. Pero el neoliberalismo olvida también la parte más trabajada del discurso de Adam Smith cuando intenta definir en que consiste la mano invisible. Según Smith la mano invisible es producto del egoísmo de los mercados, no dejaba de fascinarle como una ciudad como París (enorme ya en aquella época) se autoabastecía con productos que, en ocasiones, venían desde muy lejos. Smith explicaba como algunos comerciantes eran capaces de traer los recursos desde muy lejos en busca de su beneficio económico… París era el mercado. Pero en la actualidad quien comercia son las grandes empresas y el egoísmo no está en ese ser jurídico e impersonal, sino en sus ejecutivos y accionistas. Ahora el mercado ya no se abastece de lo que este necesita sino que el comprador debe aceptar lo que a las empresas les produzca mayor beneficio. Cualquiera puede decir que los mercados tienen más variedad de productos de los que ha habido nunca, pero si nos fijamos esto es una falacia, lo que realmente tenemos es una enorme variedad de productos elaborados con un número de productos muy reducido y ,entre tanto, gran variedad de productos base están desapareciendo. Un ejemplo claro: hace cien años se producían cerca de diez mil vegetales comestibles, en la actualidad a duras penas llegamos a trescientos.
Así pues, en la sociedad empresarial de hoy día, los movimientos económicos se mueven bajo los dictámenes del egoísmo de directivos y accionistas. Pero podemos eliminar a los accionistas ya que el pequeño accionista no cuenta, solo cuentan los grandes que a su vez vuelven a ser empresas y, por tanto, dominadas por otros ejecutivos. Esto convierte a esos ejecutivos en los seres más poderosos del mundo, sin embargo, eluden las responsabilidades que ese poder implica. En los años setenta, el neoliberalismo paternizó a unas multinacionales verdaderamente poderosas e irresponsables y el mundo cambió hasta que la crisis del petróleo le puso freno. Para sobrevivir (la empresa era la única importante) las empresas de la época despidieron empleados a manta… solo una gran empresa japonesa de ámbito tradicional plantó cara a esa tendencia: Toyota. Toyota mantuvo a sus empleados a pesar de perder casi todo su mercado, cosa que tiene merito especial porque la automoción fue uno de los mercados más afectados. Cuando a finales de esa década la OPEP accedió a aumentar la producción, las empresas de automoción tardaron en recuperar su ritmos de producción, salvo Toyota, que en nueve meses paso del quinto al primer lugar entre las empresas japonesas de automoción y del dieciocho al tercero en el mundo, fue entonces cuando accedió a fabricar vehículos Honda en sus factorías, salvando a esta compañía que, poco tiempo después, inició su expansión por todo el mundo.
Pero si hablamos del triunfo de una empresa no neoliberal también podemos hablar del fracaso de grandes empresas neoliberales en el sentido puro y duro: ENRON y Pan-Am.
Pero no todo en Milton Friedman fue neoliberalismo. Partiendo de su crítica a Keynes explicó los efectos inflacionistas de la sociedad del bienestar, sin embargo, en lugar de intentar compensarlos, prefirió atacar directamente al estado del bienestar preconizado la ley de la oferta y la demanda libre. Fruto de esta teoría Gran Bretaña desmontó su sistema de seguridad social por otro más parecido al norteamericano en manos privadas. Originalmente los británicos salieron beneficiados con el cambio al eliminar las corruptelas funcionariales, pero en la actualidad, años después, sufren la eliminación paulatina de servicios para mantener el beneficio que la empresa privada exige.
Friedman también actualizó la teoría cuantitativa de la moneda y defendió un sistema socialista de impuestos donde el que mas ganaba debía aportar mayor porcentaje a las arcas del Estado para pagar un sistema social, esto es algo que el nuevo neoliberalismo más salvaje no ha seguido y es algo que el denunció, porque su máxima aportación a la economía fue la aportación de ideas y teoría para salvar las crisis económicas y ya hemos visto como la espiral egoísta es la fuente principal de estas crisis.
Pronto sabremos si su muerte abre la puerta a un neoliberalismo más salvaje o el retorno a las economías sociales. Porque Milton Friedman, a pesar de su avanzada edad, era escuchado por todos los líderes de la economía mundial y su desaparición traerá cambios en las políticas económicas de las naciones más poderosas así como en la OMC, el FMI y el BM.

John Rawls. Una teoría  de la Justicia

John Rawls. Y la teoría de la Justicia

fuenteJ. Ricardo Vudoyra Nieto

JOHN RAWLS

TEORÍA DE LA JUSTICIA


Después de la denominada Crisis de los paradigmas, la filosofía o teoría política padeció un receso tal que parecía anunciar su desaparición del ámbito del debate teórico. A esta situación contribuyó, en no menor medida, la dominación de las teorías utilitaristas en el estudio político y social con un carácter teleológico por un lado así como consecuencialista por el otro. Además, el utilitarismo presenta un atractivo inherente a su utópico devenir, no sólo toma como punto de referencia a individuos “reales” de “carne y hueso” en las decisiones entorno a conflictos sociales, sino que también aparenta basarse en la idea de igualdad al tomar a todos los actores –prima facie– como iguales.

Así, la obra de John Rawls aparece como una inminente respuesta al utilitarismo reinante. Es una vehemente y veraz crítica a la falsedad detrás de los apelativos utilitaristas que no necesariamente resultan éticamente correctos y que mientras apelan al principio de mayorías, dejan fuera a muchos agencies sociales (las minorías por ejemplo) lo cual es contraintuitivo en las democracias liberales modernas caracterizadas por el pluralismo y, peor aún, es un acto plagado de injusticia.

De esta manera, a raíz de que John Rawls publicara en 1971 A Theory of Justice, se desencadenó una avalancha que hasta la fecha no se ha podido detener. Se han publicado infinidad de artículos y de libros que giran entorno al tema de la justicia, siendo que ésta parecía ser un asunto que yacía dormido en el mismo rincón olvidado en que lo hacen (o hacían, al menos) los clásicos de la filosofía política.

La obra de Rawls yace dentro de un marco de pluralidad propia de las democracias liberales modernas. El pluralismo agudo es claramente apreciable desde el título mismo de su libro: A Theory of Justice. Rawls no está hablando de La teoría de la justicia, sino que pareciera asumir desde el comienzo mismo que él solamente aporta Una teoría que de ninguna manera es la única que prevalece, o que esté per se encima de las demás. El pluralismo agudo es pues, el problema que más le preocupa a Rawls en su obra, principalmente en tanto éste es, como ya mencioné, un elemento que caracteriza a las sociedades modernas democráticas. Sin embargo, esto no siempre se vislumbró en su obra, en un principio su teoría buscaba ser universalista en el más amplio sentir de la expresión. No es sino hasta que aparece Political liberalism (Liberalismo político) cuando va reduciendo su paisaje hasta el punto en que sus detractores dicen que difícilmente llega a salir de Massachusetts. De esta manera, lo que comenzó siendo una teoría universalista de la justicia, pasa a ser una teoría política de la justicia en sociedades democráticas liberales y, además, altamente industrializadas, y el pluralismo agudo se transforma en pluralismo racional.

Las tesis sustentadas en su teoría en conjunto, pueden resumirse en la pregunta planteada en Liberalismo político: ¿Cómo es que exista durante un tiempo prolongado una sociedad justa y estable de ciudadanos libres e iguales, los cuales permanecen profundamente divididos por doctrinas razonables, religiosas, filosóficas y morales? Y aún podemos agregar más, la experiencia histórica nos muestra que rara vez sucede la cooperación justa entre ciudadanos libres e iguales bajo tales condiciones. La respuesta a esto se da con el concepto que engloba la esencia de la teoría rawlsiana: justice as fairness. El justice as fairness adopta un procedimiento de naturaleza contractualista en el cual una serie de individuos sobre los cuales ha caído un grueso velo de ignorancia situándolos en una Posición Original donde nadie sabe quién es, y lo único que conservan además de la capacidad de razonar, son las nociones económicas (bienes escasos) y sociológicas (clases sociales) más elementales. Así, mediante un contrato social hipotético, establecerán la estructura básica de la sociedad en que vivirán. Así pues, por medio de este hipotético contrato se establecerán los principios de justicia que regirán la vida social, a través de un método que es justo por sí mismo, esto es justice as fairness.

“Una concepción de justicia es más razonable que otra, si personas racionales en la situación inicial escogen sus principios por encima de los otros por el papel mismo de justicia (...) Debemos determinar qué principios se adoptarán racionalmente dada la situación contractual”. Estos principios serán los siguientes:

1.- Principio de libertades. Distribución de igual número de esquemas de libertades para todos.

2.- Principio de diferencia. Las desigualdades económicas y sociales han de estar estructuradas de manera tal que aseguren: a) mayor beneficio de los menos aventajados, y b) que cargos y posiciones estén abiertos a todos en condiciones de justa igualdad de oportunidades.

El orden Jerárquico de los dos principios de justicia y sus subdivisiones, es de la siguiente manera 1>2”b”>2”a” y éste no debe ser roto bajo ninguna circunstancia. Según Rawls “ambos principios, conjuntamente con la prioridad atribuida al primero sobre el segundo, regulan las instituciones básicas que aplican en la realidad estos valores”. Estos principios son, así mismo, los más adecuados para garantizar el correcto arreglo de las instituciones adecuadas a los valores de libertad y de igualdad de los ciudadanos que viven bajo democracias liberales modernas utópicamente bien ordenadas, garantizando tales valores. Únicamente basando las instituciones fundamentales en éstos principios, será posible la consecución de la cooperación social de la que hablábamos hace unos momentos.

Cabe aquí agregar que las instituciones básicas de la sociedad a las que Rawls se refiere son social (la familia), económica (el mercado) y política (la constitución), esta última es la más importante

Nada más para terminar, vale la pena subrayar que como el parteaguas teórico que significó, la obra de John Rawls ha recibido críticas severas por parte de las más variadas posturas filosóficas. Desde Robert Nozick, un liberal libertario, hasta Susan Moller Okin, una feminista moderada. A raíz de los muy diversos trabajos que se desprendieron por parte de distintos actores en la discusión, Rawls escribe su Liberalismo político, en donde (a pesar de sus negativas a aceptarlo) se aprecia cómo las críticas comunitaristas de autores tales como Walzer, Sandel y otros, lograron que Rawls aceptara la necesidad de reformular su Teoría de la Justicia original ante un duro cuestionamiento del que difícilmente pudo salvarse del todo. Sin embargo, esto apunta a que el quehacer teórico se haga día a día más enriquecedor y a que, finalmente, se consiga acercar cada vez más a establecer una definición más clara de lo que sucede con la justicia. Pero de estas críticas sería objeto un libro entero.



[1] Para fines prácticos se utilizarán los términos filosofía y teoría de manera indistinta.

[2] No es el fin del presente ensayo hablar de las críticas rawlsianas a las tesis utilitaristas; sin embargo, para ver un repaso de ello de manera muy esquematizada, ver: Gargarella, Roberto: Las teorías de la justicia después de Rawls, Madrid, Paidós, 1999.Cap. I.

[3] Desgraciadamente las traducciones al español dejan a un lado ese detalle que aunque pequeño es sustancial y traducen el título como La teoría de la justicia, eliminando el sentimiento real de la obra, de ahí que en el presente me referiré al mismo con su título original.

[4] A pesar de que este término es traducido como “justicia como imparcialidad” o “justicia como equidad”, me parece que no es fácilmente traducible, por lo que también lo dejaré tal y como el autor lo asumió.

[5] Rawls, John: A theory of justice, Cambridge, Harvard University Press, 1999, p.16.

[6] Rawls, John, Liberalismo político, México, Fondo de Cultura Económica, 1996, p. 31.

[7] Ver más en Rawls, John: A theory of justice, C. 36, p.194.

Libro: TEORÍA CRÍTICA DE LA CIUDADANÍA DEMOCRÁTICA. 9788481649376 - TEORIA POLITICA - GENERALIDADES

TEORÍA CRÍTICA DE LA CIUDADANÍA DEMOCRÁTICA. - TEORIA POLITICA -

LA POSICION LIBERAL DE LA CIUDADANIA HASTA NUESTROS DIAS

El creciente influjo de la teoría republicana de la democracia ha propiciado que la educación para la ciudadanía se haya convertido en el tema de nuestro tiempo. En efecto, el foco de atención de la política democrática empieza a pasar del diseño liberal, centrado en los partidos políticos y en las instituciones de la representación y de los gobernantes, al diseño republicano, que enfatiza la formación democrática de los ciudadanos, tanto en sus aspectos cognitivos (derechos, deberes, instituciones) como en los prácticos (participación y control). Este paso sucede en un sentido doble. Por un lado, la participación pública vuelve a considerarse indispensable para la madurez política de la persona. Por otro, se instaura la convicción de que la garantía real de que instituciones, diputados y gobernantes van a cumplir fielmente con su deber democrático radica en una ciuda- danía activa y exigente.

El objetivo principal de este texto es construir críticamente la teoría de la ciudadanía democrática. La obra se abre con la introducción histórica que ocupó los dos primeros escritos y quiere ofrecer el contexto indispensable para la inteligibilidad del concepto de ciudadanía: empezando por el mundo greco-romano, hasta las vicisitudes de la herencia republicana en Occidente, el triunfo del modelo liberal representativo y sus ulteriores reformas.

El segundo capítulo repasa críticamente las principales teorías contemporáneas de la ciudadanía (liberal, comunitarista, neo-republicana), con especial énfasis en las más recientes (la «multicultural», el «patriotismo constitucional» o el «cosmopolitismo cívico»). Se delínea la propuesta personal de los autores que postulan una síntesis en la que la ciudadanía transnacional es asumida y plenificada por la ciudadanía transcultural. En se incide sobre el papel que desempeña la educación cívica y ciudadana para asumir de modo reflexivo y crítico los derechos/deberes democráticos. Y en conclusión recapitular e insistir en la vertiente educativa y práctica de la educación para la ciudadanía.